Cuando Moisés, antes de morir, repasaba todo lo sucedido en Egipto y en el desierto lanzó una declaración espiritualmente fortalecedora. Recordó a todo el pueblo como Dios había estado con ellos y cuantas victorias les había dado.

Cuando les dijo “no temáis”, estaba diciéndole que pongan todo lo esté a su alcance para vencer.

Cuando les declaró que “él peleará por vosotros”, le estaba diciendo que las fuerzas, el poder y la victoria siempre vienen del Señor.

Estamos en medio de un combate espiritual donde reprendemos a Satanás y sus demonios para que suelten las vidas de las personas. Proclamamos salvación, sanidad y liberación sobre ellas.

Hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para que las personas sean salvas. Oremos fervientemente, asistamos a las reuniones de campaña, sirvamos con dedicación, proclamemos Su mensaje a los cuatro vientos.

¡Él nos dará la victoria! ¡Él salvará a muchos en estos días!

¡Vamos a pelear juntos esta batalla, porque Él pelea por nosotros!

Buena semana.

Llena de muchos testimonios victoriosos que contar.