A cualquier ser humano normal no le gusta vivir en discordia.  Solemos buscar esa quietud interior que se manifiesta en hechos concretos que nos tranquilizan y que; aunque el exterior sea un caos, en nuestro interior hay una seguridad única de que nada malo nos sucederá.

Según este versículo la paz o la “mucha paz” está directamente relacionada con amar la ley de Dios, porque para “ellos no hay tropiezo”.

La verdad es que la falta de paz siempre tiene que ver con nuestros errores (tropiezos).  Son nuestros pecados los que no nos permiten disfrutar de la paz de Dios.

Si amamos la ley de Dios (Su Palabra) no sólo vamos a conocerla, sino también vamos a ocuparnos de cumplirla y al cumplirla no tropezaremos, al obedecerla no pecaremos.

Su guía será más que suficiente para ver el obstáculo y sortearlo airoso. 

Nos dará la instrucción necesaria para saber qué hacer y cómo hacerlo.

Este Salmo, el más largo de toda la Biblia, está dedicado a hablarnos de la Palabra de Dios.  Amarla y cumplirla siempre trae mucha paz.

Si sos una persona normal te debe gustar vivir en paz.

Te animo a que tengas “mucha paz” amando la ley del Señor.  Obedeciendo y evitando los tropiezos que nos hacen tanto mal quitándonos la paz.

Amala, conocela, vivila…

¡Buena semana sin tropiezos!

¡Buena semana de “mucha paz”!

 

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