Eben-ezer [1 Samuel 7:12]

El pasado 11 de Setiembre cumplimos 70 años de testimonio en la ciudad.  Allá por 1949 un grupo reducido de hermanos comenzó el proyecto de establecer una nueva congregación en la ciudad.  Llamada en aquel comienzo “Segunda Iglesia Evangélica Bautista”.

Años extraordinarios de un poderoso obrar de Dios caracterizaron a esta congregación en los últimos 30 años.  Recién en 1997, por visión pastoral, se le cambio el nombre al actual “Iglesia Pueblo Nuevo”.

Algunos años fueron más intensos que otros.  Pero sin dudas en cada uno de ellos el cuidado y la compañía del Señor fueron muy reales.

Por eso es imperioso declarar que “hasta aquí nos ayudó el Señor”.  Eben-ezer!!

Esta fue la declaración que Samuel hizo sobre el pueblo cuando éste lamentaba detrás de Jehová por la necesidad de un cambio en sus vidas.

El pueblo fue animado por Samuel a hacer tres cosas.

La primera era de volverse a Dios de todo corazón.  La segunda fue de aumentar la intercesión de unos por otros, acompañado de una adoración pura al Señor. Y la tercera era el establecimiento de la victoria del Señor sobre los enemigos filisteos que los asediaban.

El pueblo se arrepintió de sus pecados y se volvió a Dios.  Se comprometieron, superando sus miedos, a interceder orando y adorando al Señor.  Y Dios les dio una gran victoria.  Samuel selló ese tiempo, señalando proféticamente con una piedra, la real y efectiva ayuda de Dios.  La llamó Eben-ezer.

70 años!!  Ruego a Dios que nunca dejemos de buscar al Señor de todo corazón, no hace falta andar lamentándose.  Mantengámonos en una búsqueda sincera de Su persona.

70 años!!  Ruego a Dios que nunca dejemos de interceder unos por otros y de adorarlo con pasión, no hace falta vivir con temor a nuestros enemigos por más feroces que se presenten.

70 años!!  Ruego a Dios que nunca dejemos de caminar en la victoria que Él ya nos dio en nuestro Señor Jesucristo.  No hace falta andar sufriendo pérdidas por la negligencia espiritual.  Lo que el Diablo te quitó; en este tiempo será restituido por Dios, como le fueron devueltas, al pueblo, las ciudades que los filisteos les habían robado. 

 

Felices 70 años.  Eben-ezer!!!

Hasta aquí nos ayudó el Señor!!

Ptr. Carlos Nelson Ibarra

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